[Historia] Juicio Divino |
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¡Buenas a todos! Hoy os vengo a presentar una historia que comencé hace unas semanas. Por el momento, subiré el prólogo (el cual es muy corto). La historia ya va algo avanzada, así que iré colgando los capítulos dependiendo de la actividad que vea en este mismo hilo. ¡Espero que os guste! PRÓLOGO: Un monasterio Sacro ???: Somnia, estás despierta? Somnia: (Alguien llama.) Sí, adelante, puedes pasar. ???: ¡Qué raro que no estés durmiendo como siempre! Vaya, ¡ese dorado pelo tuyo se ve más brillante hoy! -dijo el chico tras entrar en la habitación de Somnia. Somnia: Ah, eres tú, Krantz. (Krantz es un obispo del monasterio, a parte de mi mejor amigo. Es mi guía, el que me cuidó cuando llegué.) Krantz: ¿Qué tal has dormido? ¿Has pasado frío? ¿Tal vez necesitas una manta más? ¿Te sientes bien? ¿Tienes hambre? Somnia: (Es agotador preguntando tanto.) Sí... gracias. Pero no hace falta que te preocupes tanto por mí. (Tal vez no hace falta que seas tan cansino, ¿debería haber dicho?) Krantz: Jajaja, bueno... ¡Es imposible que no me preocupe por ti! Al fin y al cabo llevas aquí desde que tenías 6 años... y mírate ahora, toda una mujerzuela de 14. Somnia: (¿Otra vez me vas a recordar que me abandonaron?) ... -pensó en silencio mientras desviaba la mirada. Ella fue la encargada de romper el silencio que se había apoderado de la habitación. Somnia: ¿Vamos a desayunar? Tengo hambre. Krantz: Bueno... está bien, pero antes, toma, guarda esto. El obispo le entregó un libro a Somnia. Somnia: ¿Qué es esto? (Un libro. Tampoco hace falta ser un lince, pero necesito tiempo para pensar por qué me lo ha dado. ... ¿"Urias"? ¿Qué es eso?) Krantz: Un libro, guárdalo, tal vez pueda serte útil en un futuro. (Tal vez próximo...) -explicó mientras la expresión de su rostro cambiaba totalmente. Somnia: (¿Qué le pasa? Esa expresión en su rostro...) Krantz, ¿estás bien? -preguntó preocupada. Krantz: Sí... solo es que... uhm... no he descansado bien esta noche. Vamos. -dijo sin ni siquiera mirar a Somnia. - 10 minutos después, en el pasillo - Arzobispo 1: ¿Has oído lo del imperio? Parece que están atacando monasterios uno tras otro. Esto realmente se pone preocupante. Arzobispo 2: Sí... no sé por cuánto tiempo más estaremos a salvo. Somnia, al oír las palabras de los dos arzobispos, no pudo evitar preocuparse y permaneció en silencio absoluto durante un rato. Krantz: ¿Somnia? Somnia: ... Krantz... ¿realmente estamos en peligro? Krantz: ... Eres muy avispada. Sí, estamos en peligro. Los sucios perros del imperio están quemando los monasterios de las ciudades vecinas, y con ello, todos los códigos y artículos religiosos. Somnia: Krantz... Tengo miedo. Krantz: Todos tenemos miedo. No sabemos cuánto tiempo podremos estar a salvo. Por el momento limítate a hacerte fuerte, física y mentalmente. En ese instante, se escuchó un golpe muy fuerte en las afueras del monasterio. Krantz: (Mierda.) Somnia: ¿¡Q-q-qué ha sido eso!? |
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¡Está genial! Espero que sigas posteando aquí con frecuencia o/ |
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hMMMMMMMMM lo pusiste aquí que no se note el bf lo leeré por aqui porque me da pereza leerlo en el de els <2 (?) |
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Somnia Somnia es una chica rubia, de ojos claros, medida de 1.70 m aproximadamente. Tiene 14 años. Abandonada a los 6 años por sus padres en un monasterio. Su mejor amigo en el monasterio es Krantz. Por ahora, es una chica que no sabe mucho acerca de Grand Gaia. Aún no ha sido capaz de utilizar la magia. Krantz Krantz es un chico de 24 años, obispo del monasterio, tiene el pelo rojo y los ojos de un marrón oscuro. Su vida ha sido dedicada a la religión desde corta edad. Es el mejor amigo de Somnia, además de su compañero en el entrenamiento con armas. Grand Gaia Grand Gaia es el mundo donde se situa la historia. Desgraciadamente, está siendo invadida por las criaturas malignas. Rangos de las criaturas de Grand Gaia Los rangos de las criaturas de Grand Gaia se dividen de la siguiente forma: C - B - A - S - S+ El rango C y B se asigna a criaturas que originalmente no son agresivas, y no disponen de una fuerza mayor. El rango A se asigna a criaturas que poseen bastante poder y que sí son agresivas. El rango S se asigna a aquellas criaturas con una fuerza inmensa, estas criaturas no se suelen ver. El rango S+ se asigna a criaturas que aún no han sido visualizadas, pero se puede hacer una aproximación de su enorme poder, como por ejemplo, los dioses. |
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Capítulo 1: Un destino amargo Krantz estaba paralizado por el enorme estruendo que acababa de escuchar. Somnia: Krantz... ¡reacciona! ¿Qué ha sido eso? Krantz: Somnia... ya están aquí. -dijo preocupado. Somnia: ¿Quién? ¡¿Quién está aquí!? ¿¡Krantz!? -dijo mientras movía el brazo de su compañero. Krantz: ¡Tranquilízate, solo estoy pensando! -dijo, un poco enfurecido por los gritos de Somnia. Somnia: ¡Eso no responde a mi pregunta! Krantz: ¿Quién va a ser? ¡El Imperio! ¡Vienen a quemar todos los códigos! Somnia: ¿Ya...? ¿Acaso... no estaremos más tiempo... a salvo...? Krantz: Escúchame con atención, Somnia. El obispo tomó un mapa. Krantz: Si te quedas aquí, morirás o pasarás a ser su esclava, así que, por favor, escúchame y presta atención. Ya te he dicho que el Imperio viene a quemar códigos y artículos que puedan ser peligrosos para ellos. Somnia: ¿Y qué código tenemos nosotros...? Krantz:Eso es mejor que no lo sepas todavía, no lo entenderías. -dijo mientras tomaba unas barras de pan del armario del pasillo. Curas del monasterio: ¡Corred! ¡Nos matarán! Había un gran jaleo en las afueras del monasterio. Krantz: Somnia, ¿recuerdas aquella trampilla que había bajo tu mesa, por la cual entrábamos para jugar al escondite cuando eras pequeña? Somnia: S-sí... (No me digas que...) Krantz: Te toca huir. No quiero que te pase nada, ni que te rapten. Somnia: ¡No! ¡No voy a dejaros a todos aquí como si nada! Krantz: ¡SOMNIA! ¡HAZME CASO! En ese momento, la puerta que conectaba el pasillo y la entrada principal fue derrumbada por un miembro del Imperio. ???: Así que es aquí donde os escondéis, sucios creyentes. -dijo fijando su mirada en Krantz. Krantz: ... No le hagas nada. Llévame a mí. Somnia: Krantz... (Que puedo hacer... que puedo hacer...) -pensó mientras le caía una lágrima por la mejilla. ???: ¿Te sacrificarás por la chica? De todos modos nos la llevaremos como esclava para... servicios especiales... kukukuku ~ -dijo mientras comenzaba a reír, con un tono un poco perturbador. Krantz: ¿Qué estás diciendo, imbécil? Somnia: (¿Qué se cree este tipo?) En ese momento, la joven observó una gran rama de árbol al lado de la ventana. Somnia: ... (¡Se va a enterar!) ???: ¿¡Me has llamado imbécil!? -dijo mientras comenzaba a golpear a Krantz. Somnia:Oye... ¡¿qué crees que estás haciendo!? La joven tomó la rama del árbol y acometió contra el guardia, impactando en su cabeza y dejándolo inconsciente. Krantz: Somnia... gracias... pero has de marchar, ya... El obispo tomó una bolsa con unas cuantas barras de pan y la metió en una mochila, acompañada de un mapa, algo de bebida y el libro que le había entregado. Krantz: Escúchame, viaja hacia el bosque de aquí al lado, y sigue hacia el norte, has de llegar a Meirith, ahí estarás a salvo. En cuanto llegues, pregunta por Lario. Él continuará entrenándote y haciéndote fuerte. Y sobretodo, ¡no pierdas ese libro! Somnia: Krantz... Por favor... Prométeme que nos encontraremos de nuevo... -dijo mientras, inevitablemente, rompía a llorar. Krantz: Tranquila, lo que vienen buscando ya no está aquí. Nos encontraremos, te lo prometo. No dejes que te atrapen. Y ten cuidado, se dice que en el bosque hay criaturas y un malvado ladrón. Somnia corrió a abrazar al obispo, y seguidamente se adentraba en su habitación, aventurándose en la trampilla debajo de su mesa y escapando por una salida trasera del monasterio. Somnia: (Espero que todos estén bien...) -pensó mientras miraba por última vez el monasterio, a la vez que echaba a correr. - Unas horas después - Somnia: (Espero que esté todo bien...) (Este debe ser el bosque del que Krantz me ha hablado antes... ¿Un malvado ladrón? ¿Y como me protegeré sin siquiera tener un arma?) De repente, la mochila de Somnia comenzó a desprender un leve brillo dorado. Somnia: (¿Qué demonios...?) La chica abrió la mochila, pero para ese entonces ya había dejado de brillar, así que no le dio más importancia. Somnia: (Habrá sido mi imaginación...) Se escuchó un sonido extraño, como si de una criatura pegajosa se tratara. Limo oscuro: ¡Glup, glup! Somnia: (¿Un... limo? Originalmente no son violentos pero este parece dispuesto a atacarme... y yo no tengo un arma...) Sin disponer de un arma, Somnia decidió echar a correr en círculos, para cansar a la criatura que la perseguía en busca de, seguramente, el pan. ???: ¡Jajaja! ¡Qué cobarde eres! -se escuchó en la lejanía. Somnia: (¿¡Me han encontrado!?) En ese momento, un chico encapuchado se abalanzó con sus dos puñales encima del limo que perseguía a Somnia. La joven, al ver lo que acababa de suceder, cayó al suelo, petrificada. En ese instante vio cómo el chico que le acababa de salvar el pellejo, tenía un poco de su pan en la boca. ???: ¿Qué afes en mi bofque? -dijo con la boca llena. Somnia: (¿El ladrón...?) |
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Se ve interesante. Me gusta como escribes, es algo diferente a lo que estoy acostumbrada :) |
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Capítulo 2: Zelnite, el guardián Somnia: Por favor... no me hagas daño... ¡te daré lo que tengo! (No puedo hacer nada más sin tener un arma.) ???: ¿Eh? ¿Acafo tengo cara de afefino? -dijo el chico aún con el pan en la boca. Mientras decía eso, el chico se quitaba la capucha, dejando así visible su rostro Somnia: ¿No eres tú el ladrón del bosque que asalta a todas las personas que se atreven a entrar? (¿Un niño?) ???: Es cierto que asalté a una persona, pero solo por necesidad. Estaba arrancando las flores. Somnia: ¿Arrancando las flores? Ya veo... (Esto quiere decir que él en verdad es el guardián del bosque.) ???: ¿Quieres descansar? Te noto cansada, y al ser de noche, lo más posible es que aquí abajo nos molesten las criaturas. ¿Subimos? Somnia: ¿Subir? ¿A dónde? (¿Me quiere llevar a su casa?) ???: Agarra mi mano. El guardián del bosque tendió la mano para que Somnia la agarrase, y la joven lo hizo, pero con cierta desconfianza. Somnia: ¿Qué se supone qué... Antes de que pudiera terminar la frase, el guardián comenzó a clavar sus puñales en un árbol de dimensiones exageradas, trepándolo mientras agarraba a Somnia. Una vez llegaron a las alturas del árbol, Somnia pudo apreciar una hermosa vista que nunca antes había tenido la oportunidad de ver. Somnia: Whoa... esto es increíble... que en la copa de un árbol se esconda algo así... En la copa del árbol había unas fuentes de agua, acompañadas de unas flores coloridas, las cuales hacían sentir en armonía con la naturaleza. ???: Esta es mi casa. Mi nombre es Zelnite, y la naturaleza es mi aliada, vaya donde vaya. Somnia: ¿Zelnite? No había oído tu nombre nunca. Después de que el guardián revelara su nombre, la mochila de Somnia volvió a desprender un brillo dorado. Zelnite: ¡Cuidado! -dijo mientras desenfundaba sus puñales. Somnia: ¿Otra vez? Esto ya me pasó al adentrarme en el bosque. -dijo mientras abría a toda prisa la mochila. Zelnite: ¿Qué es eso? Somnia: ¿Es el libro lo que está brillando? La chica tomó el libro y lo sostuvo en sus manos durante unos segundos. Zelnite: ¿Me dejas ver? -preguntó con curiosidad. Somnia: Claro, ten. -dijo mientras entregaba el libro. Zelnite abrió el libro y se quedó callado por unos segundos Zelnite: Oye, ¿por qué está en blanco? Somnia: ¿Cómo? ¿En blanco? -dijo mientras le echaba un vistazo a las páginas del libro que el obispo le entregó. Zelnite: Es extraño, noto una sensación extraña cuando lo abro, a pesar de no haber nada escrito en él. ¡Yo también tenía un libro en blanco! Somnia: ¿Ah, sí? (Lo ha dicho como si fuera un logro) Somnia esbozó una sonrisa debido al comentario del chico. Zelnite: ¿De qué te ríes? Perdí el libro. Un día al despertar había desaparecido y en su lugar aparecieron estos dos puñales. No sé quién tiene el libro. ¿Tú no tienes arma? -dijo mientras mostraba sus puñales a Somnia. Somnia: No, no dispongo de ningún arma. ¿Te robaron el libro? ¿Un libro en blanco? -preguntó extrañada. Zelnite: Así es. Decidí nombrar a mis puñales como ese libro. Somnia: ¿Y cómo se llamaba el libro? Zelnite: Drevas. En ese momento, el libro de Somnia comenzó a brillar con una luz aún más intensa que la anterior. Somnia: ¿Pero qué pasa...? ¿Urias? -preguntó más que extrañada. Zelnite: ¡Oye, mira esto, ahora hay algo escrito en la primera página! -dijo muy sorprendido. Somnia: "Espíritu de la naturaleza, Drevas."? Zelnite: ¿Por qué está el nombre de MI libro en TU libro? Somnia: No lo sé... pero, ¿realmente será este un libro bendecido por la magia? Quiero decir, yo no sé utilizar la magia, lo cual quiere decir que el libro es mágico. Zelnite: Pero hace un momento estaba en blanco... esto no tiene sentido. El libro dejó de brillar y Somnia decidió guardarlo de nuevo en la mochila. Somnia: Como sea, ¿puedes contarme algo más de ti? Tu edad, por ejemplo. (Tengo curiosidad. Parece un crío.) Zelnite: Tengo 13 años. Me refugio en este bosque del Imperio. Es mi hogar, el lugar donde me siento seguro. ¿Y tú? Somnia: Yo me llamo Somnia, y tengo 14 añ-... Espera, ¿te refugias del Imperio? (¿¡Él también!?) Zelnite: Me dijeron que poseía un código importante, pensándolo, llegué a la conclusión de que Drevas era el código que querían, y por eso me lo robaron. Somnia: Tiene sentido. Zelnite: ¿A dónde te dirigías? Somnia: A Meirith. Mi monasterio ha sido atacado esta mañana, y he tenido que huir. He de encontrar a Lario, un experimentado guerrero, y contarle lo que ha sucedido con este. Zelnite: Somnia, tengo una petición. Somnia: ¿De qué se trata? (¿Qué me querrá pedir?) Zelnite: Verás... siento como si te conociera de antes... así que... un poco avergonzado te pido... Antes de terminar, el chico corrió a la mochila de Somnia sin que esta pudiera ni siquiera percatarse debido a la velocidad a la que se movía y robó un trozo de pan Zelnite: Bah, solo quería pan. Somnia: No te lo comas todo, tengo que llegar a Meirith con provisiones... Zelnite: Somnia, ¿puedo acompañarte? Somnia: ¿Eh? (¿Quiere acompañarme a Meirith?) Zelnite: A Meirith. No puedo simplemente dejarte ir con el misterio de Drevas y tu libro. Somnia: Pero este es tu hogar, ¿no? Zelnite: Quiero conocer a Lario. Quiero hacerme fuerte. Tengo que proteger a la naturaleza. Somnia: Proteger a la naturaleza... (Yo quiero volver al monasterio... y protegerlos a todos...) Zelnite: Si voy a ser una molestia, me quedaré aquí, no pasa nada. Somnia: Claro que no, puedes acompañarme si quieres. Pero por ahora descansemos un rato, ¿te parece? (Lo cierto es que no puedo protegerme de nada sin un arma, y los puñales de Zelnite parecen poderosos.) Zelnite: Me parece bien. - Al día siguiente, por la mañana - Zelnite: ¡Genial! ¿Qué tal si cazamos una criatura con carne suculenta y se la damos de obsequio a Lario? -dijo mientras saltaba de la copa del árbol como si nada. Somnia: ¡Oye! ¡No me dejes aquí arriba! (Este chico... realmente tiene algo.) Zelnite: ¡Salta, cobarde! ¡La naturaleza nunca hace daño a alguien que la cuida! Somnia se armó de valor y decidió saltar, afortunadamente, cayó encima de un matojo, amortiguando así el impacto de la caída. Zelnite: ¿Lo ves? No hay nada que temer. Somnia: Bien, según me dijo mi maestro, hay que seguir hacia el norte para llegar a Meirith. Pero antes de comenzar voy a comer un poco de p... (¿Qué?) Zelnite: Eehhh... ¡probablemente te lo haya robado una ardilla! ¡Son criaturas de rango C hambrientas! Somnia: Ya... y esa ardilla se llama Zelnite, ¡¿verdad!? Zelnite: Eh.. hehehe, ¡a que no me pillas! Somnia: ¡Verás como te pille! El chico comenzó a correr por el bosque en dirección al norte, seguido por Somnia que, sin saberlo, acababa de conocer a una persona muy importante. ---------- x ---------- Somnia ![]() Zelnite ![]() |
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Capítulo 3: Meirith Tras una larga persecución, Zelnite decidió parar y Somnia, agotada, le atrapó. Somnia: ¡Te dije que no te terminaras el pan! Zelnite: Perdón... tenía hambre... Pero no pasa nada, Meirith está cerca y ¡podremos comer algo! Somnia: ¿Comer? ¿Tienes dinero para comprar? (Este se cree que la comida es gratis.) Zelnite: No... ¿tú tampoco? (¡Estamos en problemas! ¡No puedo estar sin comer!) Somnia: ¡No! ¡Por eso mismo no debiste terminar con nuestras provisiones! Zelnite: No pasa nada, en cuanto lleguemos cogeremos algún encargo de un ciudadano y que nos pague. Somnia: ¿Te olvidas de que vamos a ver a Lario? La joven soltó un largo y tendido suspiro debido a lo olvidadizo que era Zelnite. Somnia: Como sea, tengo curiosidad por ver cómo es Meirith. Zelnite: A veces escuchaba a los viajeros que merodeaban por aquí, dicen que es una ciudad preciosa y que su elemento es el agua. Somnia: ¿Elemento? ¡Mira, ya puedo ver la salida del bosque! Somnia tomó el primer puesto y salió del bosque, seguida por su camarada. Finalmente, llegaron a Meirith. Zelnite: ¡...! El guardián del bosque quedó sorprendido al ver Meirith por primera vez Somnia: ¡Esto es hermoso! Meirith era una ciudad grande, regida por una gran fuente en el medio de la plaza. Realmente parecía como si la ciudad estuviera bendecida por la diosa del agua. Somnia: Fíjate... todas esas casas azules... todas estas fuentes que hay... Zelnite: Escuché que en esta ciudad se esconde un gran tesoro que no puedes coger con tus manos. Somnia: Un gran tesoro... ¿que no puedes coger con tus manos? Zelnite: Posiblemente esto haga referencia a la vista de la ciudad, es un tesoro ver a una ciudad en esta armonía con el agua. Es mágico. Somnia: Ya estamos en Meirith, Zel... ¿crees que deberíamos buscar a Lario ya? Zelnite: Deberíamos preguntar a alguien dónde vive. (¿Me acaba de llamar Zel?) En ese instante, el libro de Somnia volvió a brillar levemente. Somnia: Otra vez, Urias. (¿Qué diablos le pasa a esta cosa?) Zelnite: Parece como si tu libro quisiera comunicarse contigo de alguna forma. El libro dejó de brillar. Somnia: Me gustaría poder resolver esto... se lo preguntaré a Lario también. (¿Eh? ¿Dónde se ha metido Zelnite?) Zelnite: ¡HOLAAAAAA! ¿Me podrías decir donde vive Lario? Somnia, al escuchar eso, corrió hacia donde estaba Zelnite. Somnia: ¡Zel! ¿Qué modales son esos? Ejem... Buenas tardes, señor. El ciudadano, aún sorprendido por la fogosidad de Zelnite, decidió entablar el diálogo con Somnia. Ciudadano: Buenas tardes, ¿qué se le ofrece? Zelnite: (Tsk. ¿Qué hay de malo en mi forma de preguntar?) Somnia: Verá, venimos del bosque del sur en busca de Lario. Según sé, es una persona reconocida por aquí. Ciudadano: ¡Así es! Lario es una persona muy importante en esta ciudad. Su casa se sitúa justo en frente de la fuente central. ¿Se le ofrece algo más? -preguntó con amabilidad. Somnia: No, ¡muchas gracias! -dijo con una sonrisa en su cara. Zelnite: Vamos pues, ¿no? El chico echó a correr en dirección a la casa del entrenador de la ciudad, seguido por Somnia. Al llegar a la puerta, antes de poder llamar, esta se abrió, y una chica chocó con ellos. Chica misteriosa: Oh, disculpadme, ¿estáis bien? Somnia: Ay... sí, no te preocupes. (Qué guapa...) Zelnite: ¡Cuidado por donde vas! (Cielos... es realmente preciosa...) Chica misteriosa: No era mi intención, de veras lo siento. Ahora, si me disculpáis, he de partir. La chica marchó en dirección a la fuente de la plaza. En ese instante, Urias comenzó a brillar con una intensidad mucho mayor a la que sucedió en el bosque. ???: Somnia, ¿puedes oírme? Somnia: ¿Quién habla? Zelnite: ¿Qué dices? ¿Con quién hablas? (¿Se ha vuelto loca?) -pensó mientras se reía. ???: Puedes oírme. El libro comenzó a disminuir su brillo. Somnia: ¿¡Qué ha sido eso!? (¿¡El libro!?) Una figura de un hombre apareció en la puerta de la casa. Zelnite: ¡Oh! ¿Lario? Lario: ¿Qué os pasa? ¡Menudo jaleo tenéis mont... El entrenador se quedó petrificado al clavar su mirada en Somnia Lario: ¿Eres tú? ¿Somnia? Somnia: Sí, ¿por qué? (¿Me conoce?) Lario: ¡Santo cielo! ¡Cómo has crecido! ¡Qué guapa estás! -dijo con una expresión de felicidad en su rostro. Lario: ¿Qué te trae por aquí? Somnia: Malas noticias, por desgracia. ¿Podemos pasar? Lario: ¿Malas noticias? Claro... adelante, pasad. Los chicos entraron y Lario cerró la puerta. La casa del hombre era bastante grande y lujosa, tenía un gran sofá en el salón. Los tres se sentaron y comenzaron a hablar. Lario: Jajaja, ¿este chico tan majo es tu noviete? Somnia: N-no es mi novio, es el guardián del bosque del sur. La chica se ruborizó un poco. Zelnite: Solo soy su compañero. Él también se ruborizó. Lario: ¡Está bien, está bien! Dime, Somnia, ¿qué te trae por Meirith? Somnia: Bueno... el monasterio donde vivía fue atacado por el Imperio ayer. Lario: ¿¡Cómo!? ¡¿Están todos bien!? Somnia: No lo sé. Tuve que huir. Krantz me dijo que viniera a verte para seguir entrenándome, pero te juro que me vengaré de esos perros que han atacado mi hogar. Lario: No sabía que vuestro monasterio tuviera un código... Cielos... Espero que Krantz y los demás estén bien. Tal vez no lo recuerdes, pero cuando llegaste al monasterio, yo residía ahí. Ciertamente no pudimos pasar mucho tiempo juntos, ya que me mudé a esta ciudad imbuida por el elemento agua. Has cambiado mucho. Tu expresión es más decidida ahora. Somnia: ¿Qué es eso del elemento? Lario: Un elemento es el atributo que se adquiere en el ataque si entrenas con la magia. Los elementos se dividen en 6 fuerzas: Agua, fuego, tierra, trueno, luz y oscuridad. Somnia: Yo no sé utilizar la magia... Lario: Tranquila, te ayudaré. Y a tu acompañante también. Por cierto, chico, esos puñales que llevas, ¿de dónde los has sacado? Zelnite: Puedes llamarme Zelnite. Y estos puñales ni yo sé de dónde vienen. Hace tiempo tenía un libro y una noche des-... Antes de que pudiera terminar, Somnia interrumpió Somnia: ¡Es verdad! Lario, ¿sabes algo de esto? Es un libro en blanco, lo único que hay escrito en él es el nombre del libro que anteriormente tenía Zel, ¡se escribió solo en el bosque! A veces brilla sin venir a cuento, e incluso antes.. he podido oír una voz cuando brillaba. -dijo mientras sacaba el libro titulado Urias. Lario: ¿Un libro en blanco? ¿Se escribe solo? ¿Brillante? Urias... ¿cómo se llamaba tu libro, Zelnite? Zelnite: ¡Drevas! ¡Pero un día alguien me lo robó y en su lugar dejó estos puñales! Decidí llamarlos como el libro. Lario: ¿Cómo? ¿Te robaron el libro para dejar unos puñales? Zelnite: Sí. Lario: Eso es realmente extraño. No os puedo ayudar con esto, os recomiendo que os paséis por la iglesia y preguntéis al cura, el sabrá algo. Zelnite: Oye, Lario, ¿puedes explicarnos qué es el Imperio más detalladamente? Lario: Claro. El Imperio, aunque también conocido como el Imperio Impío, es una organización gobernada por personas de alto rango en magia de oscuridad. Lo que quieren es sumir Grand Gaia en una eterna oscuridad. Por eso mismo, están eliminando los códigos que puedan revelar la liberación del mismo. Al fin y al cabo tienen miedo de perder. Zelnite: ¿Eso quiere decir que todos los códigos han sido quemados ya? Lario: No necesariamente. Conozco dos códigos que aún siguen en pie, pero los tienen personas que no piensan dejárselo ni a su madre para que lo vea. El nombre de estos códigos es Dandelga y Heilcruseide. Zelnite: ¿Heilqué? Lario: Heilcruseide. Esto traducido significa Salvación del Cruzado. Seguramente hable sobre algún dios del elemento luz o algo por el estilo. Somnia: ¿Y crees que podremos eliminar al Imperio con los códigos restantes? Lario: Si en verdad solo quedan estos dos, no. Estamos perdidos. Somnia: Quiero hacerme fuerte... quiero aprender a utilizar la magia... quiero salvar a Krantz... Zelnite: Quiero proteger la naturaleza... Quiero comer... Lario: Es cierto, supongo que no tenéis dinero ni nada para comer, ¿no? Somnia: Una ardilla nos robó el pan. EJEM. Zelnite sonrió un poco. Lario: Os daré dinero. No sé qué podréis conseguir si seguís vuestro viaje, pero necesitáis comida. Es la hora de comer, así que si queréis podéis comer aquí conmigo y a la tarde tendremos una sesión de entrenamiento. Antes de cenar, podríais ir a la iglesia a preguntar sobre Urias. Somnia y Zelnite: Nos parece bien. Dernière modification le 1454603460000 |
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Lario Lario es un hombre de 39 años, tiene el pelo verde y los ojos azules. Mide 1.84 m. Anteriormente vivía en el monasterio. Al parecer, Lario es un buen amigo de Krantz. Conoce a Somnia, pero no mucho porque dejó el monasterio para mudarse a Meirith. Es un maestro de combate, principalmente de la esgrima y el tiro con arco. Meirith Meirith es la ciudad situada al norte del monasterio, atravesando el bosque. El elemento principal de esta ciudad es el agua. Se dice que está hecha por la Diosa de Agua. Hay una gran fuente situada en el centro de la plaza, la cual suministra agua a todas las casas. Elementos de Grand Gaia En Grand Gaia, las fuerzas elementales se dividen en 6 atributos: Agua, Fuego, Tierra, Trueno, Luz y Oscuridad. Estos elementos pueden ser controlados mediante la utilización de la magia. Dernière modification le 1454603580000 |
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Capítulo 4: Ataque y respuestas Tras una larga sesión de entrenamiento, Somnia y Zelnite estaban agotados, Lario parecía sorprendido. Lario: ¡Vaya! ¡Sois más fuertes de lo que pensaba! Somnia: Krantz me entrenó bien... -dijo mientras apretaba con fuerza la espada que le había prestado Lario Zelnite: ¡La naturaleza es la mejor maestra! Lario: Somnia, quédate esa espada. Tienes planta para ser una espadachina elegante, además no tienes arma. Así que puedes quedártela. Somnia: ¿En serio? ¡Gracias! (¿Espadachina elegante?) Lario: Ahora deberíais ir a la iglesia, a ver si os pueden contar algo sobre Urias. Somnia y Zelnite: ¡Vale! Los chicos salieron de casa de Lario, y vieron a una figura peculiar amenazando a un ciudadano. Ciudadano: ¿Qué haces aquí? ¡No hay nada que puedas conseguir! ¡Márchate! Somnia: (¿¡El Imperio!?) Guardia del Imperio: ¡Vengo buscando a unos mocosos, cállate y dime dónde están! En ese instante, el guardia giró la cabeza y pudo ver a ambos. Guardia del Imperio: ¡Ahí estáis! ¡Tú, mocosa, entrégame el código si no quieres morir! Somnia: ¿Qué código? Después de decir esto, Somnia desenvainó su nueva espada. Zelnite: A ver si el que va a morir eres tú, imbécil. El chico también desenvainó sus puñales. Guardia del Imperio: ¡No me hagáis reír! ¡Puedo utilizar magia de rango B! El guardia comenzó a susurrar algo, en ese instante, unas cadenas aparecieron en los pies de Zelnite, inmovilizándolo. Zelnite: ¿¡Qué me has hecho!? ¡Suéltame! Guardia del Imperio: Ahora tú. -dijo mientras clavaba su mirada en Somnia Somnia: (Cielos...) El guardia disparó un proyectil imbuido en oscuridad al hombro de Somnia. Somnia: No... No pienso dejar que me atrapéis, no todavía... Urias comenzó a brillar. ???: ¡Somnia! ¡Si quieres derrotar a este tipo tenemos que unir fuerzas! Somnia: ¿Urias...? Guardia del Imperio: ¡Eso! ¡Eso es justo lo que me tienes que dar, a Urias! ???: Coge tu espada y mátalo. No tengas miedo, te ayudaré. Urias dejó de brillar. Somnia: Vale. Guardia del Imperio: ¿Con quién hablas? ¿¡ACASO LE ESTÁS PIDIENDO AYUDA A TU ASQUEROSA DIOSA!? -dijo mientras comenzaba a reír Somnia: No hace falta que pida ayuda, la Diosa me acompaña allí donde voy. ¿Sabes, perro? No deberías haber venido aquí tú solo, por ser tan confianzudo vas a morir, en Meirith. Guardia del Imperio: ¡Basta de cháchara! El guardia acometió contra Somnia con su hacha. Somnia: (Urias, ayúdame.) La joven bloqueó el ataque del guardia, la espada que Lario le había regalado comenzó a brillar como lo hacía Urias. El guardia recibió un terrible contragolpe. Guardia del Imperio: Maldita sea... ¡Te voy a matar! En ese instante, el guardia recibió una puñalada por la espalda la cual hizo una gran herida, desangrando y quitándole la vida en segundos. Lario, que estaba observando desde la lejanía, esbozó una sonrisa al ver que habían acabado con el guardia y volvió a meterse en casa. Zelnite: La fuerza de la naturaleza es mayor que la oscuridad, perro. El ciudadano que estaba siendo amenazado por el guardia se acercó a Somnia. Ciudadano: ¡Muchas gracias a ambos! ¡Me habéis salvado la vida! Somnia: Lo siento... ha venido aquí por mí. Una sacerdotisa salió de la iglesia y observó el panorama en silencio. Zelnite: Somnia, la sacerdotisa, deberíamos aprovechar. Los chicos se acercaron a la mujer. Ésta se quedó mirando a Somnia detalladamente. Sacerdotisa: Muchas gracias por salvar Meirith. Esos ojos... Ese brillo en la mirada... Chica, ¿vienes de La Veda? Somnia: ... Sí, es mi ciudad natal. Sacerdotisa: ¡Cielos! Y dime, ¿cómo está todo por allí? En ese momento, Somnia echó a llorar. Zelnite: ¿Somnia? ¿Qué pasa? ¿Estás bien? Somnia: No quiero oír nada acerca de La Veda... ¿me entiendes? ¡NADA! (Mamá, papá... ¿por qué me dejásteis sola?) Zelnite abrazó a su camarada Zelnite: Ya está, tranquila. Cálmate. (Me pregunto por qué habrá reaccionado así...) Somnia: Zel... no me abandones tú también... Zelnite: ¡Claro que no! Sacerdotisa: Disculpadme. Tal vez no debería haberlo dicho. Zelnite tuvo que responder por Somnia debido a que ella seguía llorando. Zelnite: No se preocupe. Ni siquiera yo sé por qué ha reaccionado así. Por cierto, tenemos algo que hablar con usted, precisamente veníamos a visitarla. Sacerdotisa: Muy bien, pasad... -dijo invitándolos a pasar a la iglesia. Los chicos entraron con la sacerdotisa y comenzaron a hablar, con Somnia más calmada. Sacerdotisa: Muy bien, ¿qué se os ofrece? Zelnite: Mi compañera tiene un libro muy peculiar. Dicho libro se titula Urias. Hasta ahora solo sabemos que es un libro mágico que se escribe solo, ya que ayer estábamos en el bosque y se escribió el nombre de mis puñales. En ocasiones brilla. Sacerdotisa: Así que tenéis el código del Juicio Divino, Urias... En esta ciudad hay una chica que también poseía un código. Pero un día desapareció, y en su lugar había aparecido un florete gélido. Somnia: (Así que tengo un código... ¡Un momento! Krantz... recuerdo sus palabras... "Tranquila, lo que vienen buscando ya no está aquí" Krantz... acaso me regaló el código? ¿Acaso quiere que yo sea quien lo tenga? ¿Por qué haría eso?) Zelnite: ¿DESAPARECIÓ? -preguntó el chico muy sorprendido y exaltado Zelnite: ¡El mío también desapareció, y en su lugar aparecieron estos puñales! ¡Drevas! Sacerdotisa: Conque tú poseías el Código de la Naturaleza, Drevas... Tal vez deberíais buscar a esta chica. Es aprendiz de Lario, os será fácil reconocerla. Tiene el pelo de un color celeste, como si tuviera el cielo en su cabeza. Y su florete tiene una flor de hielo. Zelnite: ¡...! Somnia: ¡...! Zelnite: Somnia, ¿tal vez se refiera a la chica con la que chocamos al entrar a casa de Lario? Somnia: Puede ser... Sacerdotisa: Así que la habéis visto... Qué suerte. Según me contó Lario, ha partido a las montañas del oeste en busca de alguien. Somnia: En busca de... ¿alguien? Sacerdotisa: Es tarde, deberíais ir a casa. Podéis venir siempre que necesitéis algo. Pero antes, toma, por las molestias que haya podido ocasionar mi comentario. La sacerdotisa le entregó un lazo rosa a Somnia, el cual agarró sin pensarlo. Somnia: Gracias... y no se preocupe... La chica se puso el lazo en el pelo. Zelnite: ¡Muchas gracias! Los chicos salieron de la iglesia, en dirección a casa de Lario para cenar y descansar. |
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Capítulo 5: Un nuevo viaje Los chicos llegaron a casa de Lario, el cual recibió con un aplauso. Lario: ¡Bien hecho, muchachos! -exclamó, tratando de elogiar a los chicos. Zelnite: Lario, no hay tiempo para elogios. ¿De verdad la chica del pelo celeste es tu aprendiz? -dijo con un tono de curiosidad. Lario: Así es, es mi aprendiz desde que tenía 12 años. Ahora tiene 17. Es una chica muy fría. Se llama Ivris. Zelnite: ¿A dónde se dirige? ¿A quién busca? Lario: Se dirige a las montañas del oeste en busca de dos códigos. Los códigos que busca son los que os comenté esta mañana. Zelnite: ¿Por qué los está buscando? ¿Acaso los quiere para ella? Lario: ¡No lo creo! Ivris más bien está buscando a las personas que poseen los códigos. En ese instante, Somnia quedó petrificada. ???: Somnia, puedes oírme. Somnia: (¿Urias?) ???: Tenéis que ir a buscar a Ivris. Vuestro destino está ligado por un mismo propósito. Somnia: ¿Destino? ¿Propósito? En ese instante, alguien llamó a la puerta. Sacerdotisa: ¡Abridme, por favor! ¡Tengo información nueva! Lario abrió la puerta y la sacerdotisa se sentó con los chicos. Sacerdotisa: Muy bien... he estado buscando en los libros llenos de polvo de la iglesia y he descubierto algo que tal vez os ilumine el camino. Somnia: ¿De qué se trata? Sacerdotisa: En este viejo libro, hay una leyenda que habla de 6 códigos con una fuerza divina. Cada código tiene asignado un elemento. La mujer abrió el libro y comenzó a leer Sacerdotisa: Código ardiente del Fénix incandescente, Dandelga. Código gélido de los pétalos celestes, Lexida. Código tormentoso del Defensor Cruzado, Heilcruseide. Código esmeralda de los Bosques, Drevas. Código tenebroso del rencor, Leomurg. Y por último, Código luminoso del Juicio Divino, Urias. Somnia: ¿Quieres decir que poseo un código con fuerza divina? Zelnite: ¿Por qué perdería mi libro...? Sacerdotisa: Posees un código divino, Somnia. A Lario se le iluminó la mirada Lario: ¡PORRAS! ¡Ivris tiene una espada llamada como el código divino! ¡Su florete se llama Lexida! Sacerdotisa: No podemos retrasaros más, jóvenes. Debéis buscar a Ivris y preguntarle sobre esto. Ella es una chica con amplios conocimientos. Lario: Así que vais a partir... Os daré comida, tranquilos. -dijo mientras metía bastante comida en la mochila de Somnia. Zelnite: ¿Tenemos que partir ya? (Quiero descansar...) Sacerdotisa: Si no lo hacéis, tal vez perdáis a Ivris. Zelnite: Tienes razón, buen punto. Lario: Chicos, tened cuidado, os recuerdo que el Imperio va a por vosotros para arrebataros el código. Zelnite: No te preocupes, juro sobre mi bosque que utilizaré a Drevas únicamente para proteger a Somnia. Somnia: (Zel... ♥) Lario: ¿¡A qué esperáis!? ¡Marchaos! ¡El tiempo es oro! Os estaré esperando aquí siempre que necesitéis una sesión extra de entrenamiento. Zelnite: Preferiría una sesión extra de comida. Como sea, vámonos, Somnia. Somnia: Adiós, Lario. Y adiós, Sacerdotisa, muchas gracias por todo. Protegeré el lazo que me entregó. Los chicos salieron de la casa, en dirección a la salida oeste de la ciudad. Lario: ¿Crees que estarán bien? Sacerdotisa: Ese lazo que lleva le protegerá. Lario: ¿Qué hay con él...? Sacerdotisa: Es el lazo de su difunta madre. La Veda fue arrasada hace unos días, aunque me he enterado hace un rato. Ahora solo son unas ruinas. No he querido decirle nada, por lo visto, ella odia mucho a sus padres e incluso a su ciudad natal. Ese lazo hará que su madre esté con ella en todo momento. Lario: ¿La Veda fue arrasada...? Somnia... No me imagino lo mal que lo hubiera pasado si se lo hubieras dicho, has hecho bien. - Un rato después, en el camino oeste - Somnia: La noche ya ha caído. ¿Crees que deberíamos descansar? Zelnite: Qué pena, no hay un bosque como el mío para refugiarnos en un árbol. Somnia: Oye, Zel... Zelnite: ¿Qué hay? Somnia se ruborizó. Somnia: No es nada... solo... gracias por acompañarme. Zelnite: De nada. Al fin y al cabo yo también escuché a Urias cuando dijo que nuestro destino estaba unido. Somnia: ¿Tú también? (Parece que la fuerza del código aumenta por momentos.) En ese instante, un minotauro apareció frente a los chicos. Zelnite: ¿No podíais simplemente quedaros escondidos, no? Un minotauro, también los hay en mi bosque, criaturas de rango B que no piensan al embestir. Será fácil derrotarlo. Somnia: ... Zelnite, percibo un aura oscura alrededor del Minotauro. Zelnite: ¡No puede ser! ¡Eso quiere decir que los perros del Imperio ya han pasado por aquí y han hechizado a las criaturas! Ivris posee un código... Somnia, tenemos que acabar con este cuanto antes, Ivris está en serio peligro. Somnia: ¡Allí voy! -dijo mientras tomaba su espada. El minotauro corrió a embestir a Zelnite. Zelnite: Más rápido que de costumbre... Más agresivo que de costumbre... Se nota que está poseído. Somnia le propinó una estocada al minotauro en la pata derecha, incapacitándolo. Zelnite: Somnia, no lo mates. No hagas daño a la naturaleza, este minotauro no sabe lo que hace. Urias brilló. ???: Somnia, el poder para purificar todo lo que esté corrupto, el poder de protegerlos a todos, el poder de la luz, el poder de Urias. ¿Crees que podrás dominarlo? Somnia: Claro que sí. ???: Concéntrate, clava tu mirada en ese minotauro y susurra, Innocent Griever. La chica se acercó al minotauro y, mirándole fijamente a los ojos, susurró las palabras que había oído. Zelnite: ¡Oye! ¿Qué haces? ¡Ese minotauro te quiere matar! Somnia: Innocent Griever. Al pronunciar estas palabras, una gran energía oscura escapó del minotauro, curando sus heridas y volviendo en sí. Después, huyó. Zelnite: ¡Wow! ¿Qué has hecho? En la lejanía se escuchó una gran explosión. Somnia: ¿PERO QUÉ? Zelnite: ¡Cielos! ¡Esa explosión... viene de la aldea de la montaña! ¡Apresurémonos! Ambos partieron a toda prisa hacia las montañas, tras oír lo que para ambos era el sonido del sufrimiento. ---------- x ---------- Modelo de Lario ![]() Modelo de la chica misteriosa (y aprendiz de Lario) que chocó con Somnia y Zelnite ![]() Dernière modification le 1454755860000 |
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Capítulo 6: Somos uno Somnia: (¡La mochila pesa más de lo normal...!) Zelnite: ¡Aprisa, Somnia! Los chicos corrieron a toda prisa por el camino oeste. evitando a las criaturas poseídas. Finalmente, llegaron a Ryvern, la aldea de la falda de la montaña. Lo que vieron allí es indescriptible. Somnia: ¡...! Zelnite: ¿Pero...? ¿Qué...? No podían ni hablar, lo que vieron al llegar a Ryvern fue un sinnúmero de cuerpos sin vida ensangrentados en el suelo, casas ardiendo y a miembros del Imperio riendo a carcajadas. El cuerpo de Ivris estaba tirado en el suelo, al lado de una fuente. Somnia: ¿Por qué mis ojos tienen que ver algo así...? ¡NO PUEDO! ¡Tanta sangre...! Somnia se tapó los ojos y comenzó a llorar En ese momento, un miembro del imperio se acercó a ellos. Guardia del Imperio: Aquí estáis. Vuestro viaje termina aquí y ahora. El guardia propinó un golpe con el mango del hacha a Zelnite, dejándolo inconsciente. Somnia: ¡Zel...! ¡Ivris...! (No puedo hacer nada. Lo siento, Krantz... Me rindo.) Urias comenzó a brillar con una fuerza con la que nunca antes había hecho. ???: ¿De verdad piensas rendirte ahora? Somnia, esto es lo que quería que vieras. Tenías que estar preparada para saber que... La Veda fue arrasada, tus padres probablemente hayan muerto. No dejes que el odio se apodere de tu corazón puro, sé que deseas con toda tu alma eliminar a todos estos miembros del Imperio, pero cálmate, estoy aquí para ayudarte, a partir de hoy tú serás mi portadora. Somnia: La Veda arrasada... Papá... Mamá... Guardia del Imperio: Adiós, niñata. El guardia se preparó para propinar un ataque fatal, pero en ese instante, Urias expulsó una luz radiante, cegándolo. Somnia: ¿Qué es esto? ¿¡Qué me estás haciendo, Urias!? ???: ¡No voy a dejar que te rindas! A partir de ahora seremos uno. Nuestra comunicación termina aquí. Suelta esa espada, y blande mi alma. Hazlo, por La Veda, por Grand Gaia. El código desapareció y en su lugar había... ¡una espada! Somnia: ¿Urias es... una espada? Guardia del Imperio: ¡Mierda! ¡Muérete ya antes de que ese estúpido poder crezca! El guardia atacó a Somnia, pero fue sorprendido. Somnia: ¡CÁLLATE, MALDITO PERRO! ¡OS VOY A HACER PAGAR POR CADA COSA QUE HABÉIS HECHO! Zelnite: ¿Som...nia? La joven propinó una fuerte estocada en el pecho del guardia y pasó a otro. Guardia del Imperio 2: ¿Pero qué dem-... Somnia no le dejó terminar. Somnia: Es la hora... de que todos paguéis por lo que acabáis de hacer aquí... ¡Tengo a Urias de mi parte! ???: Oye... qué les estás haciendo a mis esclavos? Una oscura figura humana se apareció delante de Somnia. Charis: Encantado de conocerte, mi nombre es Charis. Soy un nigromante de los 6 pilares del Imperio. El nigromante ató a Somnia en unas cadenas oscuras. Charis Escúchame, esto que acabamos de hacer aquí, pensamos hacerlo en tu monasterio. Y te llevaremos con nosotros, para que veas cómo matamos a tus amigos uno a uno. Somnia: Tsk... Los ojos de Somnia comenzaron a brillar, y las cadenas se evaporaron. Somnia: ¿Te crees que voy a dejar que eso ocurra? La chica comenzó a blandir su espada elegantemente, sin despeinarse, tratando de herir al nigromante. Charis: Tu poder me inquieta, pero soy un nigromante de rango S. Además, aunque me mates, tenemos a la diosa de la destrucción de nuestra parte, ¡hagas lo que hagas tus amigos van a morir! ¡KEKEKEKEKEKEK! El nigromante comenzó a atacar a Somnia con proyectiles mágicos los cuales la joven no pudo esquivar debido al peso de su nueva armadura. Somnia: ¿Diosa de la destrucción, Maxwell...? Urias... No voy a morir aquí... lo haré por ti. ???: ¡Fénix, enséñale lo que es bueno! Un fénix hecho con magia de rango A apareció delante de Charis y chamuscó su cuerpo. Éste se recuperó, pero quedó sorprendido. ???: ¿¡De verdad crees que voy a dejar que te marches de rositas después de destruir Ryvern!? Un espadachín de pelo rojo apareció delante de Charis. Portaba una pesada claymore, y su pelo parecía una encarnación del fuego. ???: Por el amor de la Diosa, Dandelga, concédeme tu poder una vez más, por el bien de Grand Gaia. Somnia: (¿Ha dicho...?) Zelnite: (¿Dan..del...ga?) ???: Escoria, tu destino es morir. El espadachín gritó algo. ¡Ignis Weiser! Una gran ola de fuego atrapó a Charis. Charis: Porras... nos veremos en el monasterio... El nigromante desapareció junto con su ejército en una nube oscura. ???: ¡Chicos! ¿Estáis bien? -dijo acercándose a Somnia y Zelnite. ???: ¿Y qué hay de ti? -preguntó mirando el cuerpo de Ivris malherido. Zelnite: Tesoros... Oro... Naturaleza... Eso es para lo que nací. Pero ahora, Drevas, necesito tu fuerza para protegerlos a todos. Por favor, ¡cámbiame! Una gran energía del color esmeralda rodeó a Zelnite, y cambió su apariencia casi por completo. ???: ¡Wow! ¿Qué has hecho? Zelnite: Lo mismo que mi compañera... Hacerme uno con el código. Somnia: Zel... -dijo con lágrimas en los ojos. Ivris: Chicos... Somos 4... los 4 poseemos un código divino... Lexida... tú tambi-... -la chica no pudo terminar debido a sus terribles heridas. Somnia se levantó y puso rumbo hacia la fuente donde estaba tirada Ivris, después susurró. Somnia: Urias, una vez más, préstame ese poder sanador. Innocent Griever. Las heridas de Ivris cicatrizaron. Ivris: Gracias. Farlon: ¡Encantado de conoceros a los tres! ¡Mi nombre es Farlon, portador de Dandelga, os estaba esperando! Somnia: Dandelga... Zelnite: Dandelga... (¡Un momento! ¡El libro de Somnia ahora es un arma! ¿Quiere decir eso que...?) -pensó el chico mientras miraba sus puñales. Ivris: ¡Huh! Ya lo sabía. (Dandelga...) Farlon: ¡Somnia, portadora de Urias! ¡Zelnite, portador de Drevas! ¡Ivris, portadora de Lexida! ¡Tenemos que hablar seriamente! ---------- x ---------- Modelo de Somnia tras ser imbuida por Urias. (Se puede apreciar el lazo de su madre.) ![]() Modelo de Zelnite tras ser imbuido por Drevas. ![]() Modelo de Farlon imbuido por Dandelga. ![]() Modelo de Ivris imbuida por Lexida. ![]() Dernière modification le 1457541600000 |
![]() ![]() « Citoyen » 1457717220000
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Estas haciendo demasiaaaados dp2 |
![]() ![]() « Citoyen » 1458493320000
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chanchotrolo a dit : 1. Se pueden publicar múltiples historias sólo si son medianamente largas. nwn buena historia Dernière modification le 1458493380000 |